¡Felicidades Muroexe!
No todos los días una marca cumple cinco años. Y menos una marca de aquí, española, fundada por gente con inquietudes y con ganas de cambiar el mundo, a mejor, claro. Claro, hablo de Muroexe, que por algo lo pone ya en el título del post. Quizá esto tendría que ir en el blog de zapas donde hablo habitualmente de ellos pero, la verdad, me la pone como el cerrojo de un penal hacer un post menos laifstail sobre el tema y hacer algo un poco más sesudo, más aún cuando llevo un poco sin escribir aquí y cuando son, en parte, culpables de que en ese blog haya una sección llamada Made in Spain.
En estos cinco años (y los cuatro que llevan en por casa tras ese primer par y esa primera entrevista que les pude hacer ya más de tres años) han pasado muchas cosas que nos van contando en su blog.
Es muy interesante este ejercicio de transparencia (que en realidad es más bien un desnudar y mostrar la experiencia atesorada), a saber:
- Cómo se puede pasar de no vender un par a llevar tres millones facturados, un auténtico 101 sobre cosas que hay que tener en cuenta cuando montas una empresa que no todo el mundo tiene tan claro, máxime cuando hemos visto que mucha gente viene de la mano con una búsqueda tipo a Quoters, cómo hacer un presupuesto. Si queréis, en otro momento, hablamos del desgaste que supone tener que lidiar con esa falta de cultura de lo que es una empresa, sus obligaciones y los mínimos.
- Obviamente, al ser una empresa internacional que vende en todo el mundo, no pueden faltar diferentes ideas sobre la internacionalización, eso de lo que todo el mundo habla pero que muy poca gente aplica en realidad. El nudo gordiano de todo esto está en los puntos 4 y 5: adaptación al mercado local. No puedes ir por la vida con el marchamo de calidad Made in Spain si sigues pensando en el Espein is differén. A ver, puedes pensarlo, pero cuando unos inversores o posibles clientes de otro país te pongan una reunión a las 14:30 y tengas fame, comentamos.
- Claro, en este desnudarse no pueden faltar los fracasos (y los éxitos). ¿Es un éxito pasar parte de la producción a China? Obviamente, viendo los resultados en materiales, sí. Y aquí meto mi cuña: es un fracaso en un país que no puede acceder a esos materiales cuando ha sido (y es) puntero en fabricación de calzado. Una marca que quiera lanzarse no debería tener esa preocupación. Igual que nosotros, como consumidores, también tenemos una responsabilidad a la hora de adquirir producto. Dicho eso, el riesgo de lanzarse a un mundo sin gente con experiencia en ese mundo es MUY BIEN. Si quieres cambiar cosas, no lo hagas nunca con gente que sepa de ese mundo, sino con gente que llegue virginal.
- Adelanto: parte del beneficio de todas estas acciones se dedicará a una ONG. Como no han publicado aún nada, sólo os decimos esto. Lo demás que lo cuenten ellos. Y esto siempre es MUY BIEN. Lo haga quien lo haga, sea una empresa pequeña o una grande.
¿Son reflexiones de todo a cien? Claro, esto es un blog y tiene pocas palabras.
Y, claro, siempre tiene que haber alguna cosa más. En este caso, Muroexe nos ha preparado dos.
El primero es la posibilidad de que salga a la luz un nuevo producto de los que se han quedado en la mesa de diseño. ¿Cómo? Participando en esta encuesta. Las opciones 2 y 6 son ganadoras… incluso viajando menos como viajo.
El segundo es que tienen una nueva cosa. Muy loco. ¿Lo queréis? Pues tenéis que comprar en su web y veréis la sorpresa en el carrito. Ya escribiré un post sobre ello.
Y, claro, lo celebran a lo grande también en colaboración con otras marcas amigas. Y algo que es una sorpresa y que, spoiler alert, tendrá que ver con la Moleskine que lanzaron hace un tiempo. Esperamos. Igual no, pero igual sí.
Dicho todo eso, de nuevo, felicidades Muroexe, a todo el equipo que está ahí (buscadlo en LinkedIn, vagos, maleantes) y, sobre todo, mi agradecimiento tanto a Esme como a Rober por poner en marcha la idea y a Rocío (hoy) y Román (antaño) por hacer caso a este pobre señor mayor de provincias que no es capaz de poner el filtro belleza para hacerse un selfie con la mochila.
